Los colores que lo harán sentir mejor, según el Tantra

Conozca el efecto de los colores en los sentimientos, la salud y el bienestar de las personas. Sepa cómo puede mejorar su estado –con diversas técnicas- usando el rojo, azul, verde, naranja o amarillo, entre otros.

Según el Tantra, los
colores son importantes para el ambiente de un persona, sobre todo porque
afectan su equilibrio químico causando un fenómeno físico fuerte y agradable.
Los colores rojos y naranjas afectan el sentido del tiempo: por ejemplo, en una
sala de un doctor puede parecer interminable el tiempo de espera. Mientras que
si es azul o verde, todo lo contrario. 

Los
rojos y naranjas afectan el sistema suprarrenal (productor de adrenalina),
incrementando la energía del cuerpo así también que activa otros sistemas relacionados
como el inmunológico, el pulmonar o el sexual. 

Los
verdes y azules, a su vez, calman y permiten que el sentido del tiempo sea
acelerado de modo que parezca ir más rápido y una espera aparente ser más
corta, que con el rojo. Los azul y los verdes accionan el sistema endocrino y
un seria de neurotransmisores se activan produciendo calma e inspiran
pasividad, a diferencia del rojo.
 

Para
probar la sensibilidad a los colores, consiga un tablero de colores, cuantos
más tenga mejor. Tome tres tableros de cada color e ponga en forma de U cada
tablero del mismo color. Procure que haya buena iluminación. Mire
constantemente la U por al menos 32 minutos por sesión. Hágalo por la mañana y
por la noche (si es posible con espacio de 12 horas), cada día al menos por una
semana. Anote sus sensaciones inmediatamente después de cada sesión y las
generales durante el día. ¿Cómo duerme? ¿Cuáles son sus sueños? ¿Cómo se siente
en el sexo? ¿Su trabajo? ¿Amigos, enemigos, religiones, estudios, etc.?
 

Cambie
de color de uno por vez, por cada semana hasta que haya hecho con todos los
colores primarios (o todos los tableros de color que tenga). Si obtiene
resultados inciertos, repita hasta que entienda claramente cómo lo afectan los colores.
 

Después
de que usted entienda cómo afectan los colores, tome los mismos para resultados
específicos. Haga su vida como usted quisiera que fuera.
 

Según
Albert Einstein, los diversos colores representan las diferentes energías en el
campo de la relatividad. Los colores son la lengua universal y cada humano se relaciona
rápidamente el uno con el otro a través del uso de colores. Los colores tienen
una estrecha relación con los circuitos cerebrales, no solamente los más bajos
sino muy fuertes en los circuitos más altos del cerebro. 

Se
calcula que hay más de 7.500 de nombres de colores y el ojo humano puede
discernir unos 15.000.000 de colores diferentes.
 

El
Árbol de la Vida (similar al de Einstein) indica que los colores representan
las diferentes energías en el campo de Akasha.
 

El
campo de Akasha o del “Registro Akásico” representa la memoria central del
universo y puede relacionarse con la actividad más alta del circuito del
cerebro. A continuación, los colores son enumerados de acuerdo a su refracción
con la luz blanca en las principales Chakras relacionados con el cuerpo. Desde el
Chakra más baja, moviéndonos hacia arriba hasta llegar al Chakras de arriba de
la cabeza.

Rojo, naranja y amarillo

El rojo, el naranja y el amarillo están asociados fuertemente a los Chakras
Muladhara, Svadishthana y Manipura, respectivamente, y se utilizan mejor como
grupo para los rituales curativos, en
el trabajo meridiano (senderos enérgicos en el cuerpo) de todas clases y en
trabajo en el cuerpo en general. 
A menos que haya un problema específico, que
requiere un trabajo muy especial y bajo circunstancias excepcionales, los tres
Chakras deben estar activados antes de trabajar en alguno en particular. 
Cada
uno de los Chakras más altos y de los colores estarán asociados a uno o más
Chakras más bajos, los físicos. Cuando trabaje con su cuerpo, con sus seres
queridos, amigos o clientes, active sus tres Chakras más bajos, antes de
comenzar a trabajar con el Chakra específico conjuntamente con el Chakra más
alto, el espiritual.