Fundamentos
Llamada céluloterapia o terapéutica celular, comprende a una serie de
tratamientos médico-biológicos, entre ellos la Terapia Hapténica, la Terapéutica
biológica Molecular, la Terapia con Cotiledón Placentario, la Enzimo-terapia,
la Timo-terapia, la Terapia con
Aminoácidos, etc.
Todos
estos tratamientos están dirigidos a lograr la
revitalización
del organismo, a
modificar las enfermedades crónicas degenerativas y del crecimiento, mediante
el implante (por lo general intramuscular) libre de rechazos, de tejidos o
partes de tejidos extraídos de
embriones y fetos animales.
Su eficacia radica en la incorporación por parte del organismo receptor, de moléculas
afines a las células, bajo la forma de grupos bioquímicos simples.
Mecanismos de acción
Esta terapéutica, actúa sobre el aspecto químico y funcional de las
enfermedades, produciendo una modificación de las moléculas alteradas en los
tejidos enfermos.
Las células implantadas contienen estructuras proteicas, las que al ser
ingeridas (fagocitosis) por los linfocitos primero, y por los macrófagos en una
segunda etapa, sufren transformaciones químicas que les conservan intactas sus
estructuras moleculares.
El organismo del paciente, recibe así una carga de macromoléculas con alto
potencial revitalizador, ya que entre otras moléculas biológicamente activas,
recibe ADN, ARN, albúminas, nucleótidos, aminoácidos, etc., que trabajan como
verdaderas "matrices" de
nucleótidos nuevos, que actúan fijando los aminoácidos de cada proteína del
donante a estructuras homólogas en los tejidos del receptor.
Esto último es lo que desencadena las reacciones de regeneración en los
tejidos enfermos. Se trata de una verdadera corrección de la fisiopatología
celular del órgano receptor, pues está comprobado que las células receptoras
tienen un aumento en la actividad de
síntesis ribosómica (en pocas palabras, fabrican nuevas cadenas de ARN).