Si no logras resultados satisfactorios al intentar eliminar tu migraña, tal vez podrías ensayar los diferentes tratamientos alternativos disponibles para combatir este problema...

Son muchas las personas que no están satisfechas con
los tratamientos convencionales de aspirinas u otros tipos de fármacos para
quitar la migraña, no sólo por que los mismos no le dan los beneficios
buscados, sino por que también, en algunos casos, provocan efectos secundarios,
como por ejemplo acidez. Para ellos, la solución podría ser la medicina
natural.

Medicinas
alternativas para combatir los dolores de cabeza


Si bien experimentar un dolor de cabeza ocasional es
algo que le sucede a absolutamente todas las personas, y suele ser generalmente
tolerable, el dolor de cabeza crónico es una causa importante de mala calidad
de vida, y de incapacidad para desarrollar las tareas diarias.

La mayoría de la gente que sufre de dolores de
cabeza experimenta todo tipo de tensiones y problemas, aunque los dolores de
cabeza o migrañas sólo comenzaron a recibir la atención de la industria
farmacéutica y la medicina organizada muy recientemente. En este sentido, las
drogas selectivas como el sumatriptan han revolucionado el tratamiento de migrañas
y cambiado dramáticamente la calidad de vida de millones de personas alrededor
del mundo.

Sin embargo, estas drogas de última generación no
funcionan para por lo menos un 30 por ciento de los pacientes, en muchas casos
por los desagradables efectos secundarios que pueden producir en estas personas,
y, en una proporción mucho más pequeña, por efectos colaterales graves.

Esto
ha
hecho que muchas de las personas que se han tratado
con estas terapias convencionales para migrañas, comiencen a explorar las
terapias complementarias.

De hecho, la mayoría de las personas que sufren de
dolor de cabeza, nunca han visitado a un médico para consultarle por esos
dolores de cabeza, pero esto no es problema al optar directamente por los
tratamientos complementarios, que siempre son seguros (siempre y cuando sean
administrados por verdaderos profesionales), suelen ser más baratos, y más holísticos.

Según señalaron ciertos estudios, una gran proporción
de pacientes con dolor de cabeza (de 30 al 40 %) responde favorablemente al
placebo. Estos “efectos de placebo” podrían también justificar la
utilización de terapias completamente inútiles pero que sin embargo son
efectivas en varios pacientes.

De
hecho, si cierta terapia parece ser claramente ineficaz, pero es al mismo tiempo
inofensiva y económica, muchos profesionales señalan que no desalentarían a
los pacientes a utilizarlas, pues podrán esperar una respuesta favorable por el
efecto placebo.


Técnicas
cuerpo-mente


Biofeedback


El Biofeedback es una terapia sobre la que no es
sencillo obtener pruebas definitivas sobre su efectividad. Actualmente, un gran
número de clínicas ofrecen la especialidad de biofeedback para tratar los
dolores de cabeza, lo cual sugiere fuertemente que muchos pacientes se
benefician de la misma, aunque, nuevamente, esto no demuestra cabalmente su
verdadera eficacia.

El Biofeedback es sólo una de las muchas técnicas
de relajación y manejo del estrés, y puede ser igualmente efectiva sólo y únicamente
si se las aplica correcta y estrictamente. Es también una de las técnicas más
elegidas porque les ofrece a los pacientes la posibilidad de contar con una
estructura de trabajo y un terapeuta, que actúa como su propio entrenador.

La esencia de biofeedback, que a menudo se combina
con una modificación de la conducta, es enseñar a un paciente cómo enfrentar
el estrés sin efectos fisiológicos adversos. Un típico curso de biofeedback
se compone de ocho a diez sesiones semanales de 30 a 45 minutos cada una. Según
se concibe en esta práctica, aprender a controlar las funciones del cuerpo,
tales como la temperatura corporal, puede ser logrado sólo si primero se sabe
como relajar los músculos del esqueleto. Esto último se logra mediante la
relajación progresiva, y las técnicas de respiración y visualización. Pero
lo más importante, es que se mantenga una práctica diaria y continua de todas
estas técnicas.

Las sesiones de práctica pueden demandar sólo unos
pocos segundos, o bien largos minutos, pero en todos los casos tienen que ser
muy frecuentes. Por eso, se requiere de un esfuerzo consciente durante las
primeras semanas de instrucción, aunque luego, gradualmente, las técnicas de
autocontrol y de relajación llegan a ser un hábito subconsciente. Esto
pareciera permitir que muchos pacientes puedan bajar su tensión a través del día,
lo cual tiene como resultado menos dolores de cabeza.

Los niños son especialmente expertos en biofeedback,
pues a menudo pueden aprender no sólo cómo prevenir sus dolores de cabeza en
no más de cuatro o cinco sesiones, e incluso a veces pueden aprender cómo
pararlo desde la primera vez.