Para la mayoría de los países de
América Latina no es necesaria la visa para entrar a la Unión Europea,
siempre y cuando no permanezcas más de 3 meses.
Contrario a lo que muchos deben
pensar, viajar a Europa no tiene que ser necesariamente caro. Por supuesto,
debes prestar atención a la temporada y los sitios donde te alojaras y los
medios de transporte que utilizaras.
En la mayor parte de la unión
europea se utilizan los euros, pero ciertos países como Bulgaria, Croacia,
Dinamarca, Hungría, Polonia y Reino Unido no comparten esa clausula y tienen
su moneda local.
Es muy fácil movilizarte en
aerolíneas de bajo costo dentro de Europa, pero también puedes utilizar el
tren. Existen diversos paquetes que puedes aprovechar, dependiendo el tiempo
que viajaras y la cantidad de países que deseas visitar. El bus es otra
opción, pero se demora más.
El clima depende del país, pero es
muy variado dependiendo la estación. Si no le temes a las temperaturas
extremas, es preferible viajar en temporada baja y conseguir precios más
bajos y menos filas.
Es muy común que en Europa te cobren
por ir al baño en cualquier bar, no te sorprendas si te cobran 1 euro en
McDonald’s. Si solo sabes hablar español, no dejes de viajar, de alguna
forma te harás entender, pero intenta aprenderte las palabras básicas en el
idioma local.
Evita tomar los tours si no es imprescindible. Al estar todo armado, te
cansaras mucho haciendo muchas veces, cosas que no te interesan. Estas con
los horarios muy restringidos y en algún punto, no terminas de disfrutar el
viaje. Puedes comprar una guía de viaje o descargar una App en tu teléfono
para no perderte nada.