1. Establezca un contacto visual y sonría. Esto puede sonar obvio, pero los turistas suelen parecer a menudo tensionados y ansiosos, antes que relajados y cómodos.
Una sonrisa es el mejor vehículo para hacer compañías y, en algunos casos, compañeros de viaje. Tenga en cuenta sin embargo que en algunas culturas no es muy común que los extraños se sonrían, por lo que primero debe observar que hacen los locales. Además, tenga la precaución de no hacerlo si desconfía, aunque sea muy poco, de quien se le acerca.
2. Sea flexible:
aproveche las oportunidades que se le presentan. Este atento de tener todas las precauciones necesarias, pero no sea tímido para hablar con extraños, concurrir a reuniones públicas, o aceptar una invitación para compartir una mesa de restaurante.
3. Diviértase con la conversación. Lleve algún objeto que de píe para comenzar una conversación, como un pajarito, un collar inusual, un reloj antiguo de bolsillo, o una camiseta con alguna inscripción interesante. Es muy probable que alguien se le acerque a comentarle algo al respecto y así comenzar una charla con usted.
4. Utilice su propia experiencia para ayudar a otro
viajeros. Si ve a alguien que lucha para traducir "protector solar" al lenguaje local, y usted lo acaba de aprender ayer mismo, no dude en asesorarlo. La experiencia compartida impartirá un sentido de camaradería.
5. Si cena en un restaurante, maximice sus chances de conocer gente. Pida sentarse en una mesa compartida, como las del chef, el capitán, u otras generales. Sino, hágale saber al mozo que está dispuesto a ubicarse con otros.
Siéntese con su espalda contra la pared, de frente al cuarto, para establecer contacto visual con otros comensales. Y bajo ningún punto de vista pegue su nariz a un libro, lo cual se interpreta como "déjenme solo, no deseo estar con nadie".
6. Lleve algo para compartir con la gente que le satisface. ¿Quién puede resistirse a un chocolate, o a pegarle un mordisco a una delicadeza local, preparada en su ciudad natal? Lo mismo sucede con un paraguas, las guías turísticas, y los mapas. Encontrará inmediatamente que posee una gran popularidad entre la gente que olvidó los suyos.
7. Haga preguntas.
Pida consejo sobre los mejores restaurantes, negocios, y playas. Esto comenzará una conversación, y le hará a la otra persona sentir su interés en las opiniones que le brindan, además de proveerle a usted información provechosa para su viaje.
8. Si planea viajar solo, probablemente pagará más por los cuartos de hotel, cabinas de cruceros, etc., ya que no estará compartiendo los costos de la comodidad con nadie.
Algunos hoteles en Europa ofrecen cuartos para singles más pequeños, que cuesten menos: usted puede solicitar uno, pero si no, no hay manera de evitar que pague más, por lo que es bueno seguir los consejos que hemos dado, también para ahorrar costos.
9. Aunque se encuentre cómodo y abierto con los otros, no deje de observar la seguridad:
Déjele a alguien en su país o ciudad su itinerario, y entre en contacto con él de forma seguida; no revele demasiada información personal a los extraños hasta que sepa muy bien que son de su confianza; solicite los cuartos del hotel en un piso superior, para que los extraños no puedan observarle, etc.
10. Sobre todo, piense en un recorrido a solas como un placer, no como una carga.
Disfrute del lujo de poder ir a adonde usted desea, y cuando usted lo desea. Su confianza y placer en su propia compañía, acercarán a otros y lo harán muy receptivo a los demás.
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