Localizada en la boca del
Río Liffey, en la costa oriental de Irlanda, y con límites demarcados por
costas, y verdes campos y montañas, Dublín es una de las ciudades más hermosas y
sofisticadas de Europa.
La ciudad fue fundada
originalmente por los Vikingos como un centro de comercio, durante el siglo
nueve, y se mantuvo sin modificaciones durante muchos años. Sin embargo, durante
los últimos tiempos, el progreso económico que ha experimentado ha producido
cambios dramáticos, y la ciudad se ha convertido en un punto neurálgico para las
industrias de las nuevas de tecnología (Hi-Tech), el comercio moderno, y la
industria del cine, lo que también la ha transformado en un verdadero crisol de
personas de diversas nacionalidades, lo cual le da un aire muy cosmopolita.
Dublín es hoy en día una
ciudad realmente vibrante y fantástica, y su pujante y juvenil vida, pareciera
adecuarse de forma muy armoniosa con la tradicional cultura de la ciudad.
De cualquier forma,
no es nada fácil transmitir en palabras los encantos de esta ciudad, por lo que
es necesario recorrerla en persona para experimentar todo su encanto.
La ciudad tiene una
acogedora atmósfera, difícil de describir. Su barullo y ruidos le dan una gran
sensación de vitalidad, la cual también se manifiesta en la simpatía y cálida
recepción que sus habitantes proporcionan al turista. Los dublinenses, como muy
pocos en otras ciudades, ofrecen mucho de su tiempo para satisfacer a sus
visitantes. La mayoría de ellos pararán, charlarán y lo asistirán, ante cada
consulta que les haga.
Trinity College
Si desea absorber gran
parte de la historia y cultura de Dublín, no existe mejor lugar para hacerlo que
visitando el Trinity Collage (Colegio Trinidad). Situado en Collage Green, en el
centro de la ciudad, este lugar es un oasis de tranquilidad, donde podrá ver que
no existen autos ni ómnibus, sino solo bicicletas y más bicicletas. Con su
arquitectura clásica, este colegio brinda un aire muy sofisticado a toda la
ciudad, y muchas construcciones aledañas se han realizando siguiendo esta línea.
Trinity Collage Library
La Trinity Collage
Library (Biblioteca del Colegio Trinidad), contiene una de las colecciones más
grande de manuscritos medievales de toda Irlanda. El más famoso es
indudablemente, el “Libro de Kells”, un libro del Evangelio dividido en cuatro
secciones separadas. El “Libro de Kells”, fue probablemente realizado por los
monjes de Iona en el principio del siglo nueve, y contiene una lujosa copia
ornamentada en latín. Además de estos cuatro libros de Evangelios, los libros
más importantes son el Durrow (c700) y Armagh (c800). Este último proporciona la
mayor parte de la información que se tiene acerca de St. Patrick, el santo
patrón de Irlanda.
Open square, museos y bibliotecas
Por su parte, el open
square, representado en la esculturas de Arnoldo Pomodoro, “La Esfera dentro de
la Esfera (1882/3)”, está rodeado en tres lados por algunos de los edificios más
finos, tanto antiguos como modernos, de la ciudad de Dublín.
Tome también hacia al sur
y viste la New Library de Koralek (Nueva Biblioteca de Koralek), construida en
1978, y luego diríjase al hermoso Museo de Woodward, en el este (1853-1855) y
finalmente, a la Old Library de Burgh (Antigua Biblioteca Burgh), en el oeste,
(1712-1732), cuya colección de manuscritos y libros impresos es la más grande de
toda Irlanda, y su fantástica colección de bustos de mármol, que van desde 1743
hasta la fecha, incluyen entre otros el célebre busto del escritor Jonathan
Swift (realizado por Louis François Roubiliac), uno de los más finos de la
colección.
Pubs y cafés
Si no dispone de mucho
tiempo para visitar esta encantadora ciudad, la mejor que podría hacer (y, según
afirman algunos visitantes, esto es todo lo que se debe hacer) es relajarse y
absorber toda su cultura y sociedad en los diferentes cafés y pubs.
El arte de la relajación
siempre ha sido tomado de una forma muy seria por todos los Dublinenses, y la
mejor manera que han encontrado para ello es desenchufarse y mirar el mundo
pasar por alguna de sus ventanas, con una deliciosa taza de café.
Bewley’Café
Una riquísima copa en el
Bewley’ café es una forma de absorber todo el encanto de Dublín. Sumergido en la
historia y el folklore local, el Bewley’s Oriental Café es una institución
famosa de Dublín. Entrar al ambiente del local más viejo (localizado en la Calle
Grafton y Westmorland) es como retroceder a una era diferente, gracias a su
opulente construcción de madera, vidrios manchados, banquetas tapizadas en
felpa, y viejas tazas de café. Todo esto crea la atmósfera perfecta para
sentarse con tiempo, leer un libro o el periódico, y quedarse mirando a la gente
y la ciudad por la ventana.
La vida-pub
La gran competencia que
tienen estos cafés, son los más de 850 pubs que hay distribuidos en toda la
ciudad. La mayoría de las calles tienen por lo menos uno o dos pubs, donde los
dublinenses pasan horas y horas charlando, contándose hazañas y cuentos, o
simplemente gozando de la compañía de sus amigos.
Muchos pubs tienen música
tradicional y contemporánea en vivo, ejecutada por bandas locales a las que la
audiencia acompaña entusiasmada. Algunos de los pubs más viejos tienen áreas mas
cómodas y pequeñas, ideales para quienes buscan tranquilidad antes que barullo y
música.
Camine sin rumbo por
cualquier calle y entre al primer pub que llegue; las oportunidades de pasar una
gran experiencia serán mayúsculas, y seguramente no se desilusionará. El área
de Temple Bar es un área central de pubs, por lo que puede ser el punto de
partida perfecto.
Guinness Storehouse
En su tour por los pubs,
encontrará la famosa cervecería Guinness, la mismas cuyo dueño creo el
mundialmente conocido “Libro de los Records”. La cerveza que allí se despacha se
fabrica a unos pocos metros de la Guinness Storehouse, por lo que es imposible
conseguirla más fresca. Para llegar allí, debe dirigirse a St. Jame’s Gate,
Dublín 8, donde además podrá averiguar más acerca de la historia y la producción
de esta deliciosa “Bebida Negra”, puesto que el local cuenta con todo un tour
interno, en donde se exhibe toda la historia de la famosa cerveza.
Dublín tiene mucho para
ofrecer a sus visitantes, tanto a quienes gusten de las caminatas como a quienes
prefieran sentarse a reflexionar en un bar y no hacer nada. Por eso, es el lugar
perfecto para desenchufarse y acabar con el estrés.