Yoga y embarazo
Durante los nueve meses de embarazo, el cuerpo de la mujer va cambiando continuamente.
Mantener una buena forma física ayuda a conservar la salud durante este período y aumenta las posibilidades de un parto natural y activo, seguido de una rápida recuperación.
La práctica del yoga calma, centra y prepara el cuerpo femenino para el parto. También hace que crezca la conciencia de la mujer sobre el hecho de llevar dentro suyo a su futuro hijo, brindándole tranquilidad y energía creativa.
Durante el embarazo las secreciones hormonales relajan y ablandan los ligamentos que sujetan las articulaciones, de modo que el esqueleto se hace más flexible y capaz de dilatarse favoreciendo el parto.
Este aumento de flexibilidad permite una mayor respuesta a la práctica del Yoga, proporcionando una excelente oportunidad para incrementar la elasticidad.
Otro de los cambios que se produce en el cuerpo femenino es el aumento general de los fluidos corporales, por lo cual el corazón deberá trabajar mucho más para permitir que un mayor volumen de sangre sea bombeado por todo el cuerpo y para que no le falte el suministro a la placenta y a los órganos vitales.
A su vez, los riñones tienen una sobrecarga de trabajo, puesto que deben filtrar y excretar productos de desecho, no sólo del cuerpo de la madre sino también del cuerpo del hijo, mientras que la digestión se hace más lenta a causa del cambio que producen las hormonas en los músculos del conducto digestivo.
Por todo esto, el Yoga para futuras mamás combina posturas adaptadas para las embarazadas con ejercicios de respiración profunda, lo cual mejora las funciones corporales vitales, incluyendo la circulación de los fluidos, la eliminación de residuos y la respiración.
Esto reduce los niveles de estrés y tensión crónica, provocando un aumento en el nivel general de salud y energía.
Incluye además un completo esquema de alimentación para cada etapa del embarazo haciendo foco en los principales nutrientes que debe tener en cuenta la embarazada en ese momento especial de su vida.
“A medida que la mujer embarazada va logrando un mayor grado de flexibilidad y de libertad de movimientos, se encontrará cada vez más cómoda en las posturas y en los movimientos para hacer frente a las contracciones.
Cuando llegue el momento de dar a luz, sabrá instintivamente cómo emplear su cuerpo en ese momento tan especial”, afirma David Lifar, Director de la Fundación Indra Devi.
Asesoría: Fundación Indra Devi
Buenos Aires, Argentina
4774-1031 / 4786-6185
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