El compromiso en el matrimonio es la base más importante y necesaria en la relación de pareja.

El Matrimonio es como una empresa, en la cual no se aceptan socios minoritarios, ambos tienen que dar aportes significativos para proporcionarle estabilidad a esta empresa familiar.
El tener compromiso equivale a:
- Invertir tiempo, dinero y dedicación a la pareja
- Invertir tiempo, dinero y dedicación al nido familiar, que es el lugar donde viven
- Invertir tiempo, dinero y dedicación a los hijos habidos entre ambos
- Invertir tiempo, dinero y dedicación en las adquisiciones como familia
- Invertir tiempo, dinero y dedicación al crecimiento personal del conyugue
- Invertir tiempo, dinero y dedicación a la salud física, emocional y espiritual del conyugue
Todos estos tipos de inversiones, son sumamente importantes para cada uno de los dos, y cuando solamente uno de los conyugues siente, que es el único que se esfuerza, el único que contribuye, el único que se compromete, esto trae una gran carga de desilusión, apatía, tristeza y decepción, que pueden repercutir en una rebeldía por parte del conyugue, y prefiera desviar esa atención, cuidado, protección, e inversión de dinero, tiempo, y esfuerzo hacia otra persona que se muestre interesado(a) en su compañía.

Es importante, que ambos conyugues mantenga siempre un alto nivel de compromiso mutuamente, nunca es saludable de que alguno de los dos asuma cada uno de los desafíos y el otro, se sienta simplemente apático, desinteresado y egoístamente responsabilizado de la situación.
Esta falta de compromiso en la pareja, se convierte en un arma letal, que acaba con la confianza, el respeto, el cariño, y la aceptación que se puede sentir hacia la pareja, y por ello es un factor determinante, que puede desencadenar en una infidelidad en la pareja.