La Falta de Aceptación en el Matrimonio, es un factor determinante que daña la relación por completo. La Aceptación, se sustenta de dos valores humanos que son vitales en las relaciones, como lo son "La Tolerancia" y "La Comprensión".
La Comprensión, nos permite respetar a la persona, aunque no entendamos perfectamente su personalidad y pero aceptar que todos somos diferentes y vemos las cosas desde diferente enfoques, y La Tolerancia nos permite aceptar los errores del otro, sin afectar las relaciones, y tratando de que sus errores no nos afecten la relación de pareja.
La Aceptación en el matrimonio, viene a jugar un papel fundamental en las relaciones de pareja, ya que les permite sentirse libre, en su manera de pensar, hablar, conducirse, y sentirse, junto a su conyugue, ya que en un margen de tolerancia y de comprensión, la pareja no se siente agredido cuando le tratan con amor, pero le exigen cierto grado de adaptación al otro.
Cuando nos sentimos aceptados, pero se nos pide que busquemos de adaptarnos armoniosamente a las diferencias que también puede tener nuestro conyugue, el proceso se hace menos complicado, que en el caso de que no se nos acepte tal cual somos, y aun también se nos exija cambiar quienes somos, para ser quienes otros quieren que seamos.
En el matrimonio, muchísimas veces necesitaremos hacer ajustes en cuanto a nuestra manera de actuar y de comportarnos frente o a espalda de la pareja, ajustes en cuanto a nuestro circulo de amistad, ajustes en cuanto a nuestros hábitos que son producto del aprendizaje en el hogar materno, y que es totalmente contrario, a el aprendizaje que recibió nuestro conyugue, ajustes en cuanto a nuestra manera de tratar a la pareja, etc. Y todos estos ajustes son obligatoriamente necesarios para que la pareja se compenetre mejor, pero cuando estos cambios se exigen bruscamente, o se dan en un margen de NO-ACEPTACIÓN, porque la persona no se siente ni tolerada, ni comprendida, estos cambios, no se logran a cabalidad, porque es muy probable que el conyugue se resista a cambiar porque se siente rechazado totalmente.
Muchas veces cuando nos sentimos incomprendidos, y rechazados, como seres humanos, nos aislamos, y buscamos hacia otras direcciones, quienes puedan aceptarnos sin solicitarnos cambiar quienes somos, y es aquí donde muchas veces la pareja se hace presa inconcientemente de la infidelidad.
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