-mariscos y
vegetales rebozados fritos-
Ingredientes (para 4)
1 berenjena pequeña, cortada al medio (a
lo largo) y luego cada mitad en cuatro
1 cebolla roja (o violeta) cortada en aros de
1-2 cm aproximadamente
1 pimiento rojo o amarillo cortado en laminas
de 2-3 cm (a lo largo y sin semillas ni
hollejo blanco)
8 langostinos crudos, pelados (conservando la
punta de la cola) y desvenados.
2 calamares medianos, limpios y cortados en aros
de 2-3cm o 8-10 rabas.
125g de filete de lenguado o abadejo, cortado
en cuadrados de 5cm aproximadamente
450ml de aceite de girasol
para rebozar:
2 yemas de huevo
500ml agua helada
500g harina común
1 pizca de sal
para el aderezo:
4 cucharadas de salsa de soja clara
4 cucharadas de mirin
125ml de caldo de bonito*(1)
2 cucharadas de raíz de jengibre fresco,
bien picado.
*(1) El caldo de bonito, llamado dais, se elabora
con unas algas llamadas kelp o kombu y bonito
en copos (katsuobushi). En la cocina japonesa
se lo usa como sopa y como caldo. El dais instantáneo
se puede adquirir en los comercios asiáticos.
Cortar los ingredientes –vegetales, mariscaos
y pescados- y pasar en el mismo orden por la masa
rebozadora (que se habrá preparado mezclando
y batiendo todos los ingredientes). Freír
en pequeñas porciones, en el mismo orden
–primero los vegetales y luego los mariscos
y pescado- y conservar en caliente.
Calentar los líquidos de la marinada hasta
que hiervan 2 minutos, agregar el jengibre y revolver
una vez y servir en pequeños cuencos con
los vegetales y mariscos fritos.
Ejemplo, en un plato: un pequeño recipiente
con el aderezo, dos o tres ruedas de cebolla,
dos gajos de berenjena, dos o tres de pescado,
dos de ají, dos o tres rabas, y dos langostinos.
Y simplemente
dice: “Domo arigato” –gracias-
cuando te pasen el plato…
Cuando te estés despidiendo esa misma
noche, o al otro día: “sayonara”…,
algo así como adiós, hasta más
vernos….
Y entre besos y
besos, dulces esencias que nos arrastran a la
voluptuosa lujuria del placer….
(…)Diez besos
parecerán uno solo, y uno solo durará
como veinte. Un día de verano no será
una hora fugaz, derrochada la existencia en
goces que hacen perder la noción del
tiempo(…) –W. Shakespeare-
Regresa a menudo
y tómame,
sensación bienamada.
regresa y tómame
cuando la memoria se despierte,
cuando un antiguo deseo
pase por la sangre
cuando los labios y la piel recuerden
y las manos crean tocar de nuevo.
Regresa a
menudo y tómame de noche
a la hora en que los labios y la piel recuerdan.
-Constantino Cavafis-
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