Hay otro punto que podemos tener en cuenta. En determinadas situaciones, cuando lo que pasó no es especialmente grave, no hay algo que pueda llegar a ser penal de por medio y el autor parece estar arrepentido, al punto de que nos damos perfecta cuenta de que no hay posibilidades de que se repita la situación que originó el conflicto, tal vez el camino que podamos tomar es el de reportarlo a las personas a cargo, pero sin decir en ningún momento el nombre de la persona que cometió el error.
Como dice la frase hecha, se dice el pecado pero no el pecador.
Esto puede hacer que nuestros jefes puedan hacer algo respecto de la situación sin que en realidad nadie tenga que "pagar" por ello. Probablemente los directivos estén muy interesados en saber quien es la persona a la que nos referimos, así que tenemos que estar listos para ser firmes en nuestra convicción de no delatar a nadie y no dejarnos intimidar por la el momento de realizar el reporte.
El resultado de manejar una situación de esta forma suele ser que nuestros compañeros sentirán un cierto agradecimientos porque no los delatamos, a la vez que nuestros superiores verán que somos capaces de manejar situaciones negativas sin entrar en ningún tipo de histeria ni sentir la necesidad de que alguien tenga algún tipo de castigo.
Tolerancia
Para finalizar, lo que podemos decir es que la verdad es que no existe ninguna regla general aplicable a absolutamente todos los casos. Cada uno debe examinarse por separado.
Por un lado, cada ser humano tiene niveles de tolerancia distintos y por lo tanto reaccionará de forma distinta ante los mismos estímulos.
Algunos soportarán cosas que a otros los volverían locos, mientras que algunos explotarán ante la misma mínima "provocación". Esto hace que no pueda decirse con ningún tipo de precisión cuales son las formas y lo limites establecidos para tomar cada uno de las diferentes actitudes sobre las que nos hemos explayado ampliamente a lo largo de todo este curso.
Si realmente no nos molesta, ¿es necesario hacer una queja de forma "oficial"? Tal vez la respuesta sea no, aun si lo que la otra persona está haciendo pueda considerarse totalmente fuera de lugar y meritorio de algún tipo de intervención.
Y lo mismo se da en el otro sentido. Si lo que la otra persona no es algo que a simple vista parece incorrecto, pero igual nos molesta, ¿podemos planteárselo para tratar de que cambie su conducta? Probablemente si, especialmente si tenemos una buena relación.
Como podemos ver, todo pasa por cuan tolerantes somos y cuanto es lo que estamos dispuestos a soportar para asegurarnos que el clima dentro de la oficina en su forma más tolerable.
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