Se invita al paciente a juntar las manos y después se le dice:
-...Extiende los brazos hacia adelante... Aprieta bien las manos... Apriétalas más fuerte... Al mismo tiempo, mantén los brazos tiesos y rígidos como dos barras de hierro... Tus manos se adhieren... piensa que tus manos se adhieren como por efecto de un pegamento instantáneo... Tus manos se aprietan... Tus manos se aprietan cada vez más... En cuanto yo diga "tres" serás incapaz de separarlas... Cuanto más intentes separarlas, más fuerte se pegarán... Cuanto más lo intentes, menos lo lograrás... Cuando yo diga "tres" y trates de separa las manos, tendrás la impresión de que una se ha introducido en la otra... Te resultará imposible separarlas... Te será imposible soltarlas... Cuanto más trates de separarlas, más sentirás lo apretadas que están... Tus brazos se ponen más y más rígidos... Tus músculos se contraen... Tus manos apretadas están duras, como si fueran de madera... Voy a contar... Uno... Tus manos están sólidamente aferradas... Dos... Tus manos se aprietan más y más... cada vez más apretadas... Están clavadas la una a la otra... Incrustadas... Pegadas... Soldadas... Adheridas una a la otra... Están clavadas... Pegadas... soldadas... ¡Tres! Ahora no puedes separar las manos... Cuanto más lo intentas, menos lo logras... Tus manos se pegan cada vez más... se incrustan cada vez más... se sueldan cada vez más... Separar las manos te resulta imposible... imposible... Cuanto más intentas separarlas, más se aprietan la una contra la otra... Tus manos son in-se-pa-ra-bles... tus manos se pegan más fuertemente por segundos... penetran una en la otra... Imposible desanudarlas... Intenta una vez más... No puedes... Tus manos redoblan la presión... la triplican...
(Para transmitir la fuerza con la que están pegadas las manos, intenta hacer como si te costara hablar, con fuerza, como diciéndole a su inconsciente que tiene las manos tan pegadas, que hasta al hipnotizador le cuesta pronunciar una sola palabra.)
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