Hay salsas rápidas de cocción muy sencilla, pero las hay también muy elaboradas con cantidad de ingredientes, que amalgamados entre si concentran un sabor único.
Imagino que las salsas son tan viejas como la historia del hombre, y cuando ese hombre prehistórico descubrió el fuego, coció los alimentos, también es probable que buscara mejorar su sabor machacando con grasa o agua algunas plantas que también comía, y bañando con esta rudimentaria salsa sus alimentos. Estoy elucubrando, pero no debo estar muy alejado de la realidad histórica.
Ya en el siglo V antes de Jesús Cristo, los romanos habían puesto de moda sobre la mesa el Garum, que era un fermento de tripas de pescado con salmuera y hierbas aromatizantes, de olor desagradable que al parecer daba un toque especial a los alimentos. Su origen era probablemente griego y había muchos tipos de esta peculiar salsa y esto dependía del pescado del cual se usaban sus intestinos y de las hierbas añadidas, o el vino, vinagre y aceite.
Salsa, que proviene de la palabra latina “Salsul” significaba sazonada con sal y naturalmente estas fueron evolucionando, haciéndose mas exquisitas, mas elaborados, derivándose y convirtiéndose en otras salsas. Muchos autores concuerdan que fue en Francia, cuna de la gastronomía moderna, en donde nacieron muchas salsas madre o bases que hoy en día aun son ingredientes principales de una buena salsa.
Aquí nuestras primeras recetas de salsas, para acompañar carnes aves y pescados.
|