El libro de Paolo Bertrando y Darío Tofaretti de Paidos sobre "Historia de la terapia familiar" del 2004 empieza hablando de las raíces en Freud y el caso Juanito y Adler. Luego la rama cultural de Horney y Sullivan con sus asuntos interpersonales junto a John Bowlby y la teoría de los apegos que toca la impronta del imprinting de la etología, hasta llegar a las bases antropológicas actuales, fijadas por el inventor de la palabra genética, Gregory Bateson casado con Margarette Mead quienes instauran la cosa cibernética.

Los pasos hacia una ecología de la mente son los siguientes....

Del 70 al 80 surgen los diferentes modelos psicoanalíticos, sistémicos, estratégicos, personales y referencializados en líderes como Whitaker, Bowen, Selvini Palazzoli o Minuchin todos muertos ya. Del 80 al 90 adviene la complejidad donde Morin y su paradigma, ocupando la escena central hasta la década siguiente donde aparece la idea del sistema como instrumento, la narrativa familiar, el constructivismo hasta su máxima expresión en el reflecting team donde la familia observa como al otro lado del espejo, los terapeutas hablan de sus asuntos y las posiciones del no saber de las escuelas conversacionales, o la actitud posmoderna de ida y vuelta tome y traiga, como se da en la medicina pre-ventiva, curativa y pos-ventiva de rehabilitación. Del 2000 en más hay crisis y las terapias familiares se tornan inaccesibles porque son muy costosas. Aparecen los consejeros (counseling)de pareja y la psicoeducación con el lobby de terapia familiar que impulsa la clasificación hasta insertarla en el DSM IV, y el DSMV que en breve circulará el mundo occiedental.

Jay Haley en “El arte de la terapia estratégica” plantea que todo buen terapeuta debe aspirar a una sola sesión y que siendo jamás operando desde la neutralidad constituyendo una terapia para cada caso. Se darán los cambios mediante agrandamientos dramatizando, indiferenciando y mutando la situación planteada mediante acciones paralelas y similares a la puesta en cuestión. Hay que privilegiar la acción y no la interpretación ni la comprensión recordando que todos los síntomas plantean un trastorno jerárquico.

Los cambios provienen de ordenamientos directos como los consejos, las exigencias y las penitencias. Se usan paradojas: yo puedo y sé ayudarlo pero hay que ver si usted está a la altura de sus problemas.

Los pasos a seguir son simples:

Primero hay que definir el problema y los objetivos. El problema debe ser definido con claridad porque sino el problema será la ambigüedad. Y hay que mostrar la autoridad de la salud. Siempre la autoridad se impone mediante una acción de libre salud. Eso indica el contexto el meeting el meeting el timming y el target.

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