a).GRIPE.
Aunque la gripe es transmitida por un virus, no deja de sorprender que éste se haya encontrado en regiones tan remotas e inhóspitas donde el contacto humano y la contaminación pudieran justificarla y extenderla, como, por ejemplo, en Alaska. De esta manera, cabe pensar que la gripe no es tanto un producto de la actividad de los virus, sino, mas bien, la de un estado anímico que, subconscientemente, nos hace creer que somos débiles, indefensos o víctimas de una fuerza externa.
Al igual que todas las enfermedades ambientales, la gripe está directamente relacionada con la capacidad de ambientación del cerebro de cada persona al medio circundante y cambiante, la cual es diferente entre una persona y otra; entonces, puede suceder que haya momentos en que necesitemos tiempo para liberar y eliminar las toxinas, emociones y sentimientos internos, tiempo para prepararnos de cara a lo que nos espera.
Es de común conocimiento el hecho de que en una familia se contagien de gripe algunos de sus miembros, pero no todos: también se ha observado como las enfermeras y otras personas que no creen que caerá enfermas no lo hacen ¿Cómo explicar ésto, dado que el virus está regado por todo el medio ambiente?. Simplemente, aceptando que existen otros factores importantes, que, incluso, pueden llegar a ser determinantes en el contagio viral de la enfermedad.
Causas
-A nivel físico, la gripe puede desencadenarse como resultado de: una debilidad orgánica debida a la mala y/o deficiente alimentación, la exposición a corrientes de aire frías, la contaminación ambiental, una incorrecta respiración. Como consecuencia, se puede provocar escalofríos, fiebre, jaqueca, dolor muscular, calambres, espasmos, estornudos, flujo nasal y otros síntomas.
- A nivel psíquico, la gripe es el producto de la desadaptación mental a los requerimientos de una sociedad consumista, autoritaria, rígida, normativa, que inhibe y coarta la libre expresión, haciendo que nuestras emociones y sentimientos queden encerrados dentro del cuerpo, hasta que explotan por sobre saturación.
Tratamiento.
a). Masajear suavemente, durante 5 minutos, varias veces al día, los siguientes puntos energéticos:
- En el ángulo externo de la uña del dedo pulgar, a ambos lados alternadamente (11 P).
- Debajo de la séptima cervical (14 V.G).
- En el hueco del dorso de la mano, entre los dedos índice y el pulgar (4 I.G.), a ambos lados; punto sensible a la presión.
- Sobre el reborde posterior del cráneo, en un hueco a 2 dedos detrás de la oreja (20 V.B.); punto sensible a la presión.
b). Alimentarse correctamente, evitando mezclar carbohidratos con proteínas animales; consumir muchas frutas y verduras.
c). Aprender y practicar una respiración profunda, lenta y ventral(inhalar llenando desde el ombligo hasta las clavículas y luego exhalar desde estas hacia el ombligo).
d). Plantas medicinales: Para curar la gripe, tomar jugo de cebolla rama, mezclado con té y limón, bien caliente y arroparse apropiadamente.
e). Esencias florales: Acebo + Mimosa + Pino.
Segunda parte:
B). FIEBRE.
Cuando algo nos abraza, como un odio o una indignación intensos, el cuerpo libera esa quemadura en forma de fiebre; puede ser que alguna emoción "caliente" ha entrado en erupción o, bien, la vida se ha convertido en una experiencia demasiado calurosa como para soportarla. Dado que la fiebre afecta todo el cuerpo, entonces está indicando que todo nuestro ser físico - mental necesita una limpieza a fondo y un descanso.
Las fiebres repentinas en los niños pueden tener relación con conflictos internos o una rabia o dolor contenidos, entonces, como ellos no tienen la capacidad para entender sus emociones en un plano intelectual, lo expresan acudiendo a la utilización de su cuerpo; además, es también para ellos una forma de ganar tiempo, recibir mayor afecto y atención, y, así, adaptarse a la realidad. En los adultos representa una indignación interna que quema por falta de expresarla, pudiendo tener relación con la forma en que nos relacionamos con otras personas.
Tratamiento.
a).Tomar en ayunas un sudorífico estimulante de: flores de Borraja (30 gr.), con Menta (20 gr.), Poleo (3 gr.), 2 cucharaditas de miel de abejas, en ½ litro de agua, un vaso durante una semana.
b). Colocar un trapo o embace frío sobre el pliegue interno del codo y en la nuca.
c). En caso de fiebre de los niños instalarlos en un ambiente tranquilo y fresco(18ºC), aplicar hielo sobre las sienes por 5 minutos cada vez y hacerles beber líquidos
d). Ayunar, porque durante éste se enciende el fuego digestivo (agni) y, como no hay que digerir, el agni quemará lentamente las toxinas en los intestinos.
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