Quiero aclarar
que el mérito de este método no
es solo mío sino que se lo debo a mi
maestra Magda, la cuál tuvo la paciencia
de enseñarme mucho de lo que sé,
en el año 1972, aun ella lo hacia como
los antiguos pero ya en aquellos tiempos se
fue encontrando con más y más
dificultades por lo que entre los dos fuimos
cambiando el método. Veamos:
EL SUELO
Es el lugar ideal si lo que queréis es
hacer novenas o peticiones mínimas, la
sencillez, la naturalidad, es en estos casos,
lo más indicado.
Orientada la habitación con una brújula,
escogemos el lugar apropiado con relación
al Este o Norte según el caso, a ser
posible cerca de una de las esquinas dispondréis
de unas cazuelas individuales de barro para
colocar en cada una las velas que vamos a utilizar,
al hacerlo deberemos de tener en cuenta que
habrá 5 cazuelas o platos puestos de
forma pentagonal, y que en el centro colocaremos
un velón (de estos con plástico
en el exterior). Podemos también colocar
una pequeña mesa para los textos, libros
y fotografías.
LAS VELAS DE LA NOVENA
El número de velas necesario es de cinco
más 1 velón en el centro, dispuestas
en forma de pentágono, las velas que
se utilizaran son: 1 vela astrológica,
1 vela del Arcángel, tres velas para
la petición y un velón con duración
de 9 o 10 días, que sustituye a la vela
semanal.
VELAS ASTROLÓGICAS.
En el apartado en que hablábamos de los
rituales ya os he explicado la función
y empleo de la vela astrológica, por
lo que os remito a su lectura.
VELAS DEL ARCANGEL
Esta vela deberá llevar escrito el nombre
del Arcángel correspondiente según
la petición y de acuerdo con 3 conceptos
básicos: Salud, Dinero (trabajo), y Amor
(ver tablas).
VELAS DE PETICIÓN
Son como las velas de ofrenda de los rituales,
con ellas podremos combinar conceptos distintos
o unificarlos según se desee, podemos
por ejemplo ayudar a encontrar trabajo a una
persona a la vez que apaciguar la vida en su
hogar debido a ello.
Estas velas las ungiremos con aceite virgen
de oliva, de primera prensada o esencias preparadas
para los fines que perseguimos y que podemos
encontrar en tiendas esotéricas de calidad.
Para finalizar su preparación escribiremos
el nombre de la persona/s (un solo nombre por
vela y de arriba abajo o al revés según
el deseo).
El número de velas de petición
será de tres, sin que podamos variarlo.
VELÓN CENTRAL.
Al igual que en el ritual, este, hace el efecto
de velón de altar, potenciando con su
energía y simbolizando la pureza y limpieza.
PREPARACIÓN Y DISPOSICIÓN.
En capítulos anteriores hemos hablado
del lugar, la vestimenta, la mente y todo lo
necesario para empezar a utilizar las velas
mágicas, pero os facilito los detalles
para una perfecta organización.
Para apoyar las velas en el suelo, nos podemos
servir de unos aguantavelas que venden en cererías
o tiendas esotéricas, que tienen una
especie de alfiler que se clava en la base de
la vela (es importante calentar este clavo o
la base de la cera para no romper la vela).
Si no deseamos utilizar este sistema unas cazoletas
de barro (de canelones), harán la misma
función, solo que deberemos estabilizar
la base de la vela derritiendo un poco de cera
blanca; también un papel de aluminio
puede ir bien. Una vez dicho esto procederemos
a colocar las otras velas siempre en el sentido
de las agujas del reloj y de color más
a claro al oscuro, En el lado derecho colocaremos
la foto o pertenencia o simplemente nombre del
peticionario, encima de esto colocaremos un
soporte de incienso y en el lado izquierdo el
libro o oración correspondiente a la
novena, se puede utilizar una oración
estándar o confeccionada por nosotros
(da grandes resultados), al norte del libro,
colocaremos la imagen o estampa de nuestra devoción.
Es conveniente tener una caja con las velas
que iremos utilizando durante los nueve días,
que también servirá para recoger,
libros, oraciones, imágenes y fotos una
vez terminada la sesión, de esta manera
evitaremos el peligro de que se nos quemen o
manchen de cera.
Hay que decir que excepto el velón de
duración de 9 a 11 días, las demás
velas deberán ser de 20 o 22 cm., y su
duración aproximada de 8 horas.
PROCEDIMIENTO
Hasta aquí hemos explicado como exponer
el espacio, la utilidad de las velas y los objetos
que necesitamos para las velas, pero no hemos
hablado del procedimiento y mucho menos del
sacrificio al que debemos someternos. En primer
lugar encendemos el incienso, el cual solo renovaremos
cada vez que repongamos las velas, con la misma
cerilla si se puede encendemos el velón
principal, y a continuación encendemos
las velas de color claro hasta la más
oscura. Seguimos con la meditación, la
oración y finalmente la visualización
creativa, hay que seguir este orden obligatoriamente.
Cada día (durante nueve días),
y a la misma hora, deberemos repetir la operación
por el orden descrito anteriormente.
|