Nunca habías reparado en la posibilidad, y ahora te encuentras con que ha llegado el momento de soltarle la mano. Tu hijo viajará solo en avión, y te sientes verdaderamente aterrado.
En realidad, no hay nada que temer. Son muchos los padres que permiten a sus hijos pequeños viajar solos. Existen muy buenas razones para que los padres quieran poner a sus niños —que apenas han aprendido a atarse los cordones de las zapatillas— solos sobre una aeronave.
Los padres divorciados o las familias que viven separadas por grandes distancias a raíz del trabajo de uno de los mismos, necesitan enviar a sus chicos de visita. Esto, muchas veces, ocurre por orden los jueces.
Con frecuencia, los chicos pasan las vacaciones con sus abuelos o viajan para pasar algunos días con sus tías o sus padrinos que viven en una provincia alejada.
Pero antes de que saques de debajo de la cama la valija de Bob Esponja de tu hijo y comiences a empacar sus cosas, y empieces a aleccionar a tu hijo sobre cómo comportarse en el avión, hay algunos aspectos que debes tener en cuenta:
A pesar de que la edad mínima para viajar es de cinco años, algunas aerolíneas establecen la edad de siete u ocho años como edad mínima para que los chicos puedan viajar solos en vuelos directos.
En cuanto a los vuelos con conexiones o escalas, generalmente deberán ir acompañados, al menos, de un adulto.
De hecho, algunas aerolíneas no permitirán a los chicos volar solos en esta clase de vuelos hasta que sean mucho más grandes —muchas hasta la edad de 15 años—.
Todas las aerolíneas están obligadas a ofrecer un servicio para menores que viajan solos.
Esto significa que el personal de la aerolínea ayudará al chico ha llegar a buen puerto, asistiéndolo en lo que necesite, y acompañándolo de un vuelo a otro —en caso de haber escalas o conexiones—.
Este servicio viene acompañado de un arancel, que suele estar entre los 40 y los 99 dólares. El precio varía notoriamente entre las diferentes aerolíneas, y depende, sobre todo, de si es un vuelo directo o por escalas.
Algunas aerolíneas cobrarán sólo un arancel, incluso cuando dos o tres chicos estén viajando juntos.
La edad tope para el servicio obligatorio a menores varía de aerolínea en aerolínea, aunque suele fijarse entre los 12 ó 15 años. Una vez más, lo recomendable será preguntar en cada caso.
Por su parte, otras empresas ofrecen servicio opcional para menores hasta 17 años. En cualquier caso, cualquier joven menor de 17 años que viaje solo deberá tener una nota de permiso, destino, y duración de la estadía firmada por un padre o un adulto responsable.
Asimismo, los menores deberán ser recogidos por otro padre o adulto responsable en el aeropuerto de destino. Incluso cuando tu hijo de 11 años esté acostumbrado a tomar colectivos, subtes, y taxis, no se le permitirá hacerlo por cuenta propia.
Consejos para padres de niños que viajan solos en avión
· Nunca esperes hasta llegar al aeropuerto para informar a la aerolínea que el pasajero será un niño sin acompañante.
Siempre será apropiado proveer esta información telefónicamente al servicio de atención al cliente. Así, la empresa podrá informarte todas tus opciones y los aranceles involucrados.
· En lo posible, compra tickets directos para tus chicos. Si es necesario un cambio de planes, usa un aeropuerto pequeño y menos intimidatorio para la transferencia.
· Cuando dejes a tus hijos en el aeropuerto, asegúrate de haberles proveído de información de emergencia.
Ésta debe incluir instrucciones acerca de cómo manejar demoras en los vuelos, cancelaciones, contactos de emergencia, y formas de pagar gatos imprevistos.
· Familiariza a tus chicos con el ticket del avión. Enséñales a guardarlo en un lugar seguro. Después de la partida, los chicos necesitarán conservar el ticket para el vuelo de vuelta o a modo de recibo.
Usa e-tickets —boletos electrónicos— siempre que te sea posible, de modo que la información quede almacenada en las computadoras de la aerolínea en caso de emergencia.
· Intenta reservar un vuelo matutino. Si éste resulta demorado o cancelado, tendrás el resto del día para efectuar planes alternativos. Algunas aerolíneas no permitirán que niños solos vuelen en los últimos vuelos del día.
· Los niños chicos pueden tener problemas con el equipaje revisado. En consecuencia, evita enviar a tus hijos con exceso de equipaje.
Si no es posible, a la hora de revisar el equipaje, asegúrate de revisar el talón tú mismo, para asegurarte que el ticket y la etiqueta del equipaje coincidan con el destino final de los viajeros.
· Arriba al aeropuerto temprano para facilitar en proceso de check-in y para que los chicos se acostumbren al ambiente del aeropuerto.
De ser posible, muéstrales dónde se encuentran los puestos de información y ayuda, y enséñales a reconocer a los empleados uniformados.
· Procura que tus hijos lleven consigo una foto de la persona que los encontrará en el lugar de destino.
Esta foto debe tener escritos al dorso el nombre completo de la persona, la dirección, y el número de teléfono. Será necesario que proveas de esta información también a la aerolínea.
Diversión, teléfono e identificación
· Asegúrate de que el adulto que vaya a buscar a tus hijos en el destino tenga una foto de identificación.
· Empaca algunos snacks para los chicos: papitas, sándwiches, cóctel de frutos secos, y otros alimentos que puedan coger con las manos como uvas o bayas.
· Confecciona un paquete de viaje para entretener a los niños más chiquitos durante el vuelo.
Este combo deberá incluir libros, materiales de dibujo, pequeños juegos o puzzles, y cualquier cosa que los mantenga felizmente ocupados.
· Provee a tus hijos de una cantidad X de dinero en efectivo para cubrir gastos imprevistos y para efectuar llamadas en caso de emergencia.
· Adicionalmente, asegúrate de que los chicos sepan cómo realizar llamadas de cobro revertido, y provéeles de una tarjeta telefónica antes de viajar como así también de una lista con los números más importantes. Asimismo, infórmales que no podrán usar el teléfono durante el vuelo.
· Que tu hijo tenga cinco años —y que pueda volar solo— no quiere decir que pueda manejar todas las situaciones implicadas por su cuenta, especialmente si nunca ha volado antes.
Los padres deberán usar el sentido común y tomar la decisión evaluando si el o los chicos están suficientemente maduros para viajar en avión.
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