Cómo
combatir el síndrome pre-menstrual
Vitaminas y minerales
Al principio de este artículo
comentábamos que hay más de una terapia alternativa
a los medicamentos tradicionales y nombrábamos además
de las terapias de hierbas a las vitaminas y los minerales.
Habiendo comentado del posible efecto
placebo y de la poca información con evidencia científica
que existe sobre las hierbas, vamos ahora a hacer un breve repaso
a lo segundo, sobre lo que podemos seguramente encontrar mucha más
información y tenemos mayor conocimiento de cómo es
que producen sus efectos sobre el cuerpo.
Además, tenemos que recordar también que el uso de
estos suplementos dietarios y complejos vitamínicos están
siendo ahora recomendados por las asociaciones de salud de diferentes
países.
Si estamos en la búsqueda de una nueva forma de sentirnos
mejor y de suplementos que funcionen, entonces podremos encontrar
grandes beneficios en el uso del calcio, el magnesio y la vitamina
E.
- Calcio: El calcio es es un elemento
químico, de símbolo Ca y de número atómico
20. Es un elemento esencial. Cada persona tiene entre 1,5 y 2% de
calcio en peso, del cual el 99% se encuentra en los huesos y el
resto en tejidos y fluidos corporales interviniendo en el metabolismo
celular.
Lo curioso es que muchos de los síntomas más clásicos
del síndrome pre-menstrual se asemejan muchísimo a
aquellos que se presentan en nosotras cuando sufrimos de una deficiencia
de calcio. O por lo menos es lo que nos dicen los endocrinólogos,
que son aquellos que han investigado este tema con profundidad.
La verdad es que nadie entiende totalmente a que se debe el síndrome
pre-menstrual, cuales son las razones detrás de esta situación
física.
Algunas de las últimas teorías que se están
manejando indican que el problema puede en realidad indicar que
la mujer que esta sufriendo de este problema puede tener en realidad
una importante deficiencia en la cantidad de calcio en su organismo,
que puede causarle algunos de estos síntomas y por lo tanto
la solución puede estar en el consumo de suplementos de calcio.
En estudios que se han realizado sobre cientos de mujeres y que
se han publicado en revistas de información y divulgación
científica, se han estudiado los efectos que tiene el calcio
sobre las mujeres que están pasando por el este tipo de síndrome
del que hemos estado hablando.
Lo resultados mostraron que suplementos de calcio de aproximadamente
unos mil doscientos miligramos contribuyen a aliviar de forma más
que notable los síntomas del síndrome.
Para que tengamos una idea de que cantidades de calcio estamos hablando
(ya que hablar en miligramos no suele tener demasiado significado
para la mayor parte de las personas), la cantidad de esta sustancia
que se le dio a cada una de las mujeres en el suplemento es el equivalente
a aproximadamente unos cuatro vasos de leche.
Igualmente no tenemos que ilusionarnos demasiado ni pensarnos que
estamos hablando de una cura milagrosa.
Los efectos del calcio sobre los síntomas no son instantáneos,
sino que se necesita de un tiempo para que empiecen a sentirse.
En particular, el estudio demostró que el alivio comenzaba
realmente cuando ya se había estado llevando a cabo el tratamiento
por aproximadamente unos dos meses.
Puede parecer mucho tiempo, pero por otro lado los resultados demuestran
que a partir del tercer mes de tratamiento los efectos fueron muy
importantes.
En los grupos que siguieron el tratamiento las mujeres notaron que
desde ese momento, y mientras mantuvieron el consumo del suplemento
de calcio, comenzaron a tener tan solo la mitad de los síntomas
que mostraban anteriormente y que todavía seguían
demostrando las que estaban recibiendo un tratamiento con un placebo,
como dijimos anteriormente.
Hay, sin embargo, al menos dos síntomas que el calcio no
parece ser capaz de combatir. Por un lado, la fatiga asociada y
tampoco el insomnio.
No es necesario que comencemos directamente con el consumo de suplementos
de calcio, sino que lo mejor siempre es intentar lograr que ingrese
en el cuerpo de forma natural, gracias a nuestra dieta.
Si es necesario, tenemos que tratar de cambiarla al menos un poco,
para agregar a ella una mayor cantidad de productos fuertes en calcio.
Podemos consultar a nuestro médico para saber cuales son
las cantidades promedio que posee cada alimento de esta sustancia.
A lo que apuntamos es a consumir entre mil doscientos y mil quinientos
miligramos de calcio por día.
El nutricionista puede ayudarnos a calcular como se esta dando nuestro
consumo y como es que tenemos que mejorarlo.
Pero si simplemente no podemos consumir tantos lácteos como
es necesario, entonces podemos apuntar a los suplementos de calcio
y utilizarlos para llegar a la cantidad que es necesaria.
Y no debemos nunca consumir simplemente los suplementos, sino que
deben estar acompañados de una alimentación regulada,
ya que sino no son absorbidos correctamente.
- Magnesio: Recientemente un grupo de investigación realizó
y editó un importante estudio respecto a la utilización
del magnesio, comparándolo con un placebo.
Con los resultados en la mano, podemos ver que aparentemente una
cierta cantidad de magnesio (aproximadamente unos doscientos miligramos
por día, lo cual no es mucho en realidad) pueden reducir
en gran parte la retención de agua y también la hinchazón
que puede asociarse con este problema del que hemos estado hablando.
Por otro lado, se realizó también otro estudio, que
fue una continuación del anterior en realidad, que dio como
resultado la demostración de que una cierta cantidad de vitamina
B-6 (cincuenta miligramos) junto con los ya nombrados doscientos
miligramos de magnesio ayudaban a reducir los síntomas relacionados
con los extremos cambios de humor (como por ejemplo la ansiedad
extrema) de la mujer,
- Vitamina E: Un suplemento de vitamina
E parece tener también algunos efectos beneficiosos. O por
lo menos eso es lo que dice un pequeño estudio publicado
durante los ochenta.
Si bien la realidad nos muestra que no existen demasiadas pruebas
que demuestren que esto es verdad, pero la vitamina E no tiene prácticamente
ningún efecto colateral y si es un poderoso anti-oxidante
y tiene otros efectos saludables, la verdad es que no hay ningún
daño en intentar uno de estos suplementos.
- Vitamina B-6: Algunos estudios parecen
demostrar que una dosis diaria de vitamina B-6 de cien miligramos
ayuda a aliviar bastante una buena parte de los síntomas
del síndrome pre-menstrual, incluida la depresión.
Pero, a diferencia de lo que sucede con la vitamina E, una cantidad
alta de B-6 (mayor a los cien miligramos) puede llegar a tener efectos
nocivos sobre la salud de la mujer, por lo tanto tenemos que tener
cuidado cuando la consumimos, y nunca excedernos.
Ejercicio
Finalmente hay un último consejo
que parece adecuarse a la mayor parte de los problemas. Hay que
hacer un cambio de estilo de vida, especialmente si somos personas
sedentarias.
Hay que moverse, caminar, hacer ejercicio. El ejercicio aeróbico
es esencial para que nos sintamos bien. Una dieta compleja de carbohidratos
también ayuda a reducir los síntomas.
Lo que hay que decir es que no hay nada
que vaya a terminar con esta situación, que es natural, por
otro lado. Simplemente, lo que tenemos que hacer es tratar de sufrirlo
lo menos posible, dándole al menos una oportunidad a todo
lo que tenemos a mano para hacerlo, y seguramente encontraremos
al menos un poco de alivio.
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