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CREENCIAS SOBRE
EL DIOS DEL MAL: al que llamamos: Lucifer, Belcebú
o Satanás.
Son sinónimos
de FOSFOROS: del griego PHOS (luz) y PHERO (que
lleva). El portador de la luz. Nombre que los
griegos daban a la estrella matutina, Venus,
Lucero, a la que también llamaban Heósforo.
Cuando la palabra se tradujo al latín,
se convirtió en Lucifer. Lucífero
es brillante, que emana luces. Lucífogo,
que escapa de la luz. Lucifer es, además,
sinónimo del demonio y por extensión,
persona muy mala, sin piedad. También
es definido como Satán, Satanás,
Luzbel, Belcebú, príncipe de las
tinieblas y en español familiar mengue.
En Apocalípsis (20:2) también
se lo sindica como "la vieja serpiente".
Johann Wolfang vön Goethe (1749-1832) en
su obra maestra "Fausto", creó
otro sinónimo: "Mefistófeles",
quizás del griego "el que no ama
la luz".
La Serpiente: símbolo de la Sabiduría
(relacionada con las diferentes Afrodita-Venus)
se considera que fue una orden religiosa muy
antigua, portadora del conocimiento universal.
FOSFORO: (griego) "El que lleva la luz",
nombre del planeta Venus, en la Aurora; al atardecer
era llamada Héspero.
FOSFOREAS: (Grecia) Fiestas griegas en honor
de Fósforo o Lucifer.
LUCIFER: (Grecia y Roma) nombre del planeta
Venus al aparecer en el horizonte.
BELCEBU: viene de "BAAL-ZEBUB" (filisteos
de Accarón - Dios de las moscas) equivalente
de "Baal" (Asiria, Fenicia, Cartagena),
dios identificado con el Sol, también
llamado "Bel".
Fue llamado "dios de las moscas",
porque éstas siempre están donde
hay sol y lo siguen. Intimamente relacionado
con Belti-Balati "Señora de la Vida".
Beltir (Mesopotamia) "Señora";
Ishtar, planeta Venus, diosa del amor y la belleza
y la fecundidad, (relacionada con Afrodita/Venus
e Isis).
Posiblemente, confundido con BELIAL (Fenicia).
Idolo de los fenicios, de hermosísima
apariencia, tenía el espíritu
más abominable y bestial del Infierno.
Se le tributaba culto en Sodoma. Según
el Antiguo Testamento, genio del mal, espíritu
destructor y jefe de los demonios. Belial arrastró
a la mayor parte de los ángeles a la
rebelión y fue uno de los primeros arrojados
del Paraíso.
Por último, BALEIGUR (Escandinavia) sobrenombre
de Odín, o Wotan o Wodan. Dios solar
al que se rendía culto el 21-25 de diciembre.
CONCLUSION: La lucha ideológica religiosa
que comienza con los hebreos, se extiende a
los judíos y judeo-cristianos llevando
a tapar y confundir los nombres atributos de
antiguos dioses e incluso, malversar muy intencionalmente
sus atributos, para imponer a un nuevo Dios,
¿qué ganaban con ello?, el salir
de la esclavitud, la miseria y el ignominio
público y social; pero nunca se alejaron
de las bases populares de las creencias sobrenaturales
de los fenómenos de la naturaleza estacionales,
todos arraigados a la "Diosa Madre"
y al "Dios Padre".
CREO EN DIOS, PERO COMO UN SER ADULTO Y RACIONAL;
YA NO ME CONDICIONAN LOS FALSOS SENTIMIENTOS
DE CULPA QUE ME QUISIERON IMPONER, PARA MANEJARME
A SU GUSTO. SI LA IGLESIA CATOLICA, APOSTOLICA
Y ROMANA CREYERA EN DIOS, DEBERIA PEDIRLE PERDON;
PORQUE SU REINO SE HA CIMENTADO A TRAVES DEL
PODER TERRENAL, OLVIDANDO LAS ENSEÑANZAS
DE DIOS; RINDIENDOLE CULTO Y PLESBECIA AL PODER
DE TODOS LOS TIRANOS DE LA TIERRA: "EL
ORO, EL DINERO, LAS RIQUEZAS, LAS POSESIONES
MATERIALES".
"Quien tenga ojos que vea; quien tenga
oídos que oiga".
FINALMENTE: Los
afrodisíacos forman parte de ese principio
femenino del cosmo, al cual pertenecen. Corresponden
a la fuerza "luna" que debe morir
para provocar el cambio, para volver a renacer
nueva, con las fuerzas adquiridas del Sol (fuego-tierra
y fuego-aire) y la influencia de Venus (fuego-agua,
con sus ambivalencias y tendencias para el amor
y la guerra).
POR ULTIMO: Los afrodisíacos, como principios
femeninos (luna-tierra) e inherentes a él,
son fuerzas de "EROS" (vida); también
de "TANNATOS" (muerte); para integrarse
con el principio masculino (cielo-sol) y alcanzar
el equilibrio (ying-yang) en la unión
sexual kármica, carnal y espiritual.
El crecimiento acelerado de la humanidad en
el último milenio, conjuntamente con
la opresión político-religiosa,
como elementos de poder de sometimiento del
hombre por el hombre, han hecho que la humanidad
olvide su pasado para observar parámetros
de valores adquiridos recientemente, valores
acordes con necesidades foráneas a la
esencia humana primitiva, pero asentados en
lo negativo del poder de supremacía de
unos sobre otros. El hombre fue conducido a
buscar su "felicidad" por caminos
que no llevan a ella, colocándolo en
un estado de permanente insatisfacció,
en todas las áreas -psíquicas
y físicas- imposibilitándole llegar
al "Amor", a la conservación
de la unión cósmica con su paralelo
opuesto.
El retornar a la naturaleza humana implica una
necesidad de muerte para provocar el cambio
y un nuevo renacimiento. Por eso, son necesarios
los "afrodisíacos", para devolverle
a la mujer su participación activa en
la evolución del mundo y al hombre su
capacidad de sentir. Ambos deberán aprender
a vivir en armonía (ying-yang) para no
provocar desequilibrios en el futuro, de esa
forma alcanzará la plenitud para el regreso
a las fuerzas divinas (TAO).
(Aclaración: dentro de cada ser humano
hay fuerzas Ying y Yang; no necesariamente el
hombre como ser físico (o la mujer) lo
poseen por separado; y la unión de los
opuestos, si bien están dados por la
unión masculina-femenina, puede también
estar contenida en una masculina (con predominio
ying) con otra masculina (con predominio yang),
al igual que en lo femenino).
CONCLUSION
FINAL:
Como podemos observar, los afrodisíacos
son algo más de lo que pretendería
la vulgaridad, o del hecho transgresor del sexo
animal del cual cultural y moralmente, nos alejamos,
pero en nuestro interior deseamos y nos animamos
a nuestras más íntimas fantasías.
"Educar", escuché por allí
decir a alguien, "es una forma de reprimir"
y no estoy en desacuerdo si se refiere al hecho
puntual de lo moral o falsa moral religiosa
pero también, se puede "educar para
la vida" y eso es respetando y respetándonos
como seres humanos, sin reprimir nuestro instinto
a la vida, trayendo seres humanos a este mundo
para la paz y no para la guerra; para la construcción
y no para la destrucción; para el amor
y no para el odio; para el recuerdo y no para
el olvido...
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