Nuestro amado mundo cada día es más difícil y más impetuoso. Abunda el vicio, el crimen y la violencia. Por otra parte, cada día hay más enfermedad y por lo tanto más muerte.

Producto del egoísmo vemos en las noticias cómo cada día hay más desamparados y el abismo entre ricos y pobres es más visible. Los científicos viven alarmados porque saben que nuestro planeta, la única
esperanza para muchos, muy pronto dejará de existir. Nuestros sueños para las edades futuras son inciertos, precisamente porque cada día el hombre es más malo, más egoísta y está más alejado de Dios.
Por misericordia de Dios, sus hijos, no tenemos que desesperarnos, el mismo Jesús lo expresó claramente cuando dijo: "No se turbe vuestro corazón", y seguidamente nos da la razón por la cual nos pide que no nos turbemos ¿saben cuál es?, pues léanlo con sus propios ojos: ". . . voy pues a preparar lugar para vosotros . . . vendré otra vez y os tomaré a mí mismo para que donde yo estoy, vosotros también estéis" (Juan 14:1-3). El no nos dejará desfallecer por siempre en este mundo
perdido y malo, él viene muy pronto a buscarte a ti y a mí. Te preguntarás seguramente: Si que hermoso, pero ¿cuándo vendrá? ¿cuándo es que realmente ha de venir?. Lo más interesante del
caso es que, aunque no nos dejó la fecha de su venida, si nos dejó pistas claras para saber cuán cerca está su regreso.
Veamos algunas de ellas: Hambres, guerras y rumores de guerras, enfermedades cada día más contagiosas y terribles, terremotos y otros desastres naturales, un mundo cada día más crítico y decadente en lo físico y en lo moral, falsos cristos y profetas, intentos fallidos de paz y seguridad, etc. (Mateo 24; 2 Timoteo 3:3; 1 Tesalonicenses 5:3).
La Biblia nos alerta acerca de falsas enseñanzas con respecto a la Segunda Venida de Cristo (Mateo 24:23). Por eso abundan los textos bíblicos que nos dicen cómo realmente vendrá:
• No vendrá misteriosamente, todos le veremos y le escucharemos (Apocalipsis 1:7; Marcos 24:27).
• Vendrá de la misma forma en que ascendió. Siendo visto detenidamente por los que presenciaron su muerte (Hechos 1:11).
• Cuando él venga los impíos querrán ocultarse de él y los fieles de Dios nos gozaremos con su venida, pues nos iremos con él. (Isaías 25:9; Apocalipsis 6:16)
Querido amigo, cuando en este mundo te veas asfixiado por los problemas y las luchas de la vida, levanta tu cabeza porque tu redención está cercana. Cuando vivas momentos de gozo, levántala
también porque se acerca la era del gozo y la alegría sin igual. Únete al apóstol cuando dijo: "Aguardando el feliz cumplimiento de nuestra esperanza: El regreso glorioso de nuestro Gran Dios y
Salvador Jesucristo" (Tito 2:13 VP).

Compruebe lo Aprendido
1. ¿Cuál es el hermoso destino de los Hijos de Dios?
2. ¿Será su venida secreta y misteriosa? Abunde en su respuesta.
3. ¿Qué crees que debes hacer para ir con el Señor cuando él venga?