Berowne (Aparte).- He aquí la obra del
hígado(1), que hace de la carne una sustancia
divina y de la joven oca una deidad. ¡Pura,
pura idolatría! ¡Dios nos corrija!
Desbarramos.
-"A buen fin no hay mal principio",
trabajos de Amor perdidos. W. Shakespeare. -
(1)Desde los más
remotos tiempos era considerado el higado como
el órgano en que residía el amor.
En "The rape of Lucretia", en "Mucho
ruido y pocas nueces", etc. localiza Shakespeare
en el higado, conforme a las ideas antiguas,
los afectos amorosos, y no en el corazón.
En la celebérima oda XXXIII de Anacreonte
se alla el siguiente pasaje, en dimetros gámbicos
catalépticos puros a base anapéstica,
cuando llega el Amor empapado de lluvia con
alas, aljaba y ballesta, y vate le calienta
las manos junto al hogar: -Vertida por nosotros
la obra integra del poeta teyano, podemos ofrecerle
la siguiente traducción en el mismo metro
del original:-
<<Vaya
-dijo-, probaremos
este arco, por si la lluvia
ha dañado algo dus fibras.>>
Y lo tiene, y como un tábano
me hiere en medio del hígado.
Otros datos:
Los Chamanes de Cochinchina comoen el higado
de los enemigos muertos en combate, creyendo
que el hígado es la sede del valor, que
así se transmitirá a ellos. -Sociología.
W.F.Ogburn y M.F.Nimkoff, "El individuo
y la cultura 3-2"-
Esto es algo que
pude aberiguar acerca del amor:
(...) Mi amado es blanco y rubio, señalado
entre diezmil:
Su cabeza, como oro fino, sus cabellos crespos
negros como el cuervo.
Sus ojos, como de palomas junto a los arroyos
de las aguas, que se lavan con leche, y a la
perfección colocados.
Sus mejillas, como una era de especias aromáticas,
como fragantes flores; sus labios, como lirios
que destilan mirra que trasciende.
Sus manos, como anillos de oro engastados de
jacintos; su vientre, como claro marfil cubierto
de zafiros.
Sus pernas, como columnas de mármol fundadas
sobre basas de fino oro; su aspecto, como el
Libano, escogido, como los cedros.
Su paladar, dulcísimo: y todo él
codiciable. Tal es mi amado, tal es mi compañero,
oh doncellas del Jerusalén... -"El
cantar de los cantares" de Salomon-
"He amado cada
día, como si el ser amado estuviera a
punto de morir. Como si yo fuera a morir mañana..."
-Anaïs Nin, "Diario II (1934-1939)-
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