Japón
El país del “Sol Naciente”
recogió muchas influencias de la belleza
y la cosmética china.
El cuidado del cuerpo está íntimamente
ligado en Japón a la vida religiosa,
por lo que los hombres y mujeres de este país
han tenido siempre en aprecio el mundo de la
estética.
Aceites, pigmentos y polvos
de alazor son algunos de los productos que estas
mujeres usaban para su belleza. La tinta china
embellecía también sus ojos.
El cabello era tratado con el máximo
de atenciones puesto que, tener el pelo negro,
brillante y voluminoso era símbolo de
gran belleza.
La pintura japonesa de todos los siglos ha dejado
patente muestra de los mimos que dedicaban sus
mujeres a la belleza del cuerpo y del cutis.
El Siglo XX a lo Actual: La Estética
Integral
En estos dos siglos, los acontecimientos históricos
de una parte y la evolución de la ciencia
de la otra, han marcado los sucesivos cambios
estéticos de la mujer.
Fue tan sólo a principios del siglo XX
cuando las mujeres llevaban anchos y largos
vestidos y, sin embargo..., ¡nos parece
tan lejano! De la palidez que las damas querían
conseguir a toda costa al bronceado permanente,
que con igual obsesión se desea hoy en
día, han pasado poco más de cuarenta
años.
Décadas de esplendor se han sucedido
rápidamente por épocas de crisis,
de grandes guerras. Los cambios sociales han
sido apresurados y con ellos la moda y la Estética,
que se han amoldado a cada nuevo periodo.
Lo que antes se mantenía durante décadas
dura actualmente unos pocos años.
A la eterna necesidad de belleza en el mundo
femenino se han unido la ciencia y un nuevo
sistema de vida en el que es imposible separar
la actividad diaria del aspecto personal. Las
mujeres de hoy en día tienen ante ellas
un mundo que nunca antes se hubiera podido sospechar
por el alto grado de conocimientos científicos
han ayudado, y ayudarán enormemente,
a mejorar el trabajo de la esteticista. De una
parte, al conocer más profundamente los
orígenes y las causas de muchos problemas
del organismo, es más fácil poder
aplicar tratamientos que los solucionen.
Además, los conocimientos técnicos
son, hoy por hoy, imprescindibles en los Institutos
de Belleza, puesto que resultan fundamentales
para la aplicación de todo tipo de tratamientos.
La inmensa mayoría de los tratamientos
efectuados en un Instituto de Belleza requieren
la estrecha colaboración de la esteticista
con los procedimientos científicos. Desde
la limpieza de cutis con vapores de ozono o
aplicaciones de rayos ultravioleta, la incorporación
del rayo láser para muchos tratamientos,
o los tratamientos anticelulíticos con
alta tecnología, vemos cómo en
la Estética actual y prácticamente
en todos los terrenos se hace imprescindible
la aplicación de técnicas científicas
de primer orden.
|