Lo siguiente que tenemos que tener en cuenta cuando ya tenemos todas las herramientas técnicas es la conexión. O tal vez necesitemos pensarlo antes, ya que de lo que podamos (o deseemos) pagar puede también depender que tipo de sistema nos convenga utilizar.
En realidad, la conexión es probablemente los más importante de todo lo que hemos estado diciendo hasta este momento, ya que sin ella el resto de las cosas no son más que inútiles piezas de equipamiento a las que no podremos sacarle ningún provecho. Es la conexión la que, en definitiva, determina la velocidad y calidad de la transmisión, aun más que el tipo de equipamiento que estemos utilizando.
Por supuesto, aquí también se aplica lo que ya hemos visto que es una regla absoluta (o prácticamente absoluta) en la tecnología: cuanto más paguemos, mayor calidad estaremos obteniendo.
La mejor calidad posible que podemos obtener es la conexión por transmisión satelital. Y, obviamente, es muy cara. Y no es tan poco tan fácil de obtener o de encontrar una empresa que nos brinde el servicio. En general, este servicio en particular solo es usado por las poderosas empresas multinacionales, a las cuales el gasto mucho no las afecta y que, además, le sacan mucho provecho a esta forma de comunicación.
Ahora, vayamos a ver otros tipos de conexión, las cuales probablemente nos resultarán mucho más accesibles y simples de encontrar, al menos si no trabajamos para The Coca Cola Company.
Un servicio mucho más sencillo de encontrar y disponible mucho más ampliamente es una línea ISDN (o Integrated Services Digital Network o, en castellano Cadena Digital de Servicios Integrados). Tener este tipo de conexión que utiliza una línea telefónica hace mucho más simple la transmisión de multimedia a través de una red. Es una línea T1 (lo que significa que es una forma de transmisión de una señal digital de información con formato DS1 a 1.54 megabytes por segundo) que por suerte es ofrecida por muchas compañías telefónicas en estos días. Es la mejor opción, en especial si nuestros encuentros van a ser con gente de Europa, ya que allí esta muy distribuida.
Finalmente, nos queda una tercera opción, que es la más sencilla, barata y disponible para prácticamente la totalidad de nosotros. Y es conectarnos a través de un IP (siglas de Internet Protocol o Protocolo de Internet, en español). La mayor parte de las personas con una computadora tiene en estos días acceso a la world wide web (como lo están haciendo, inclusive, en este mismo instante, sin ir más lejos), así que es una forma muy fácil de encontrarnos con casi cualquier persona con la que necesitemos arreglar una entrevista a través de la videoconferencia.
Esta última opción nos resultará especialmente útil cuando las conferencias son dentro de la misma empresa. La principal contra que tiene es que el ancho de banda suele ser limitado, lo cual, por supuesto, ocasiona que la calidad de la imagen y el sonido sea menor, amen de que puede generar delay y retrasos en la transmisión de los datos, generando el conocido efecto robótico y los cortes en el sonido.
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