Los aguacates, conquistaron a los Ibéricos y se adaptaron a las recetas típicas españolas de salazones, gazpachos y ensaladas, dándoles un cierto toque de originalidad y de allí pasaron a todo el mundo donde se consume en ensaladas como una fruta exótica.

El aguacatero es un árbol apreciado por sus grandes frutos llamados aguacates, originario de México, de una región con clima semitropical su nombre con el que en lengua nahuatl se designa al árbol, ahuacaquahuitl, y al fruto, ahuacatl, cuyo significado hace referencia a la forma de testículo del fruto lo que le asigna una mistica leyenda afrodiciaca.

Los aztecas y los mayas de Yucatán y Guatemala los cultivaron en México y lo extendieron hasta propagarse hacia América del Sur donde se encuentra con el nombre de palta.

Existen vestigios de aguacates de doce mil años de antigüedad en la región de las Pirámides de Teotihuacán, en el estado de Puebla. Se han encontrado vestigios arqueológicos en antiguas inscripciones de estos pueblos donde el árbol del aguacate se encuentra ampliamente representado.

El aguacate está formado por una cáscara fina, cuya dureza y consistencia depende de la variedad. La epidermis está recubierta de una fina capa protectora en la que se encuentran aceites y sustancias insecticidas que protegen el fruto cuya pulpa es suave, de consistencia similar a la mantequilla cuando está madura.