El huevo consta de varias partes, de afuera hacia dentro: La cáscara constituye el 10% de su peso, sus poros permiten el intercambio gaseoso. Es permeable al agua, por lo que no es convenientes lavarlos al cómpralos para almacenarlos en nuestra despensa. Su color depende de la raza de la gallina, aunque son algo más resistentes los huevos de cáscara morena.

Las membranas testáceas son estructuras proteicas que rodean la clara y en un extremo forman la cámara de aire que se va haciendo mas grade cuanto más viejo es el huevo. La clara representa el 30% de su peso y está formada sobre todo por proteínas (entre un 12 y un 13%). La ovo albúmina es la más abundante y es considerada como la proteína patrón por su correcta proporción de aminoácidos esenciales. Encontramos también la avidina que es sensible al calor, cuando se toma el huevo crudo se combina con la vitamina biotina (interviene en la formación y el metabolismo de las grasas y carbohidratos. Está ampliamente distribuido en la naturaleza y es muy abundante en la yema de huevo) formando un complejo que hace que esta vitamina no se absorba.

La yema se aproxima al 60% de su peso, es rica en elementos lípidos predominando los ácidos grasos saturados y el colesterol (unos 250-360mg por unidad de 50-60g o 2.11 onzas), tiene también proteínas, vitaminas liposolubles, fósforo y algo de hierro. Su coloración está en relación con la alimentación del animal, a mayor presencia de carotenos más color tendrá la yema.

Son una opción de "comida rápida" barata y nutritiva que se pueden tomar para el desayuno, el almuerzo o la cena indistintamente, aunque se suele comer mas en el la mañana con un suculento desayuno, en tortillas, fritos, revueltos o como ingredientes de panquecas y waffle, aunque tienen pocas calorías, están llenos de vitaminas, minerales y otras sustancias importantes para la salud,

El huevo ha sido simpre despreciado por su contenido de colesterol pero en las ultimas investigaciones, especialmente las hechas por científicos de la Harvard School of Public Health, (Escuela del Departamento de Salud de Harvard), se sugiere que se pueden añadir uno o dos huevos al día a una dieta de bajas calorías y que no tendrán ningún efecto dañino en los niveles del colesterol en la mayoría de las personas. Y se ha concluido que los adultos sanos pueden comer hasta 7 huevos por semana sin aumentar el riesgo de una enfermedad del corazón, sin embargo usted puede consultar esto con su medico de cabecera.

Una yema de huevo grande contiene 5 gramos de grasa y solo 1.5 gramos de grasa es saturada eso quiere decir que la mayoría de la grasa en las yemas de los huevos no es saturada, es el tipo de grasa que baja el colesterol malo. Así es que aunque las yemas de huevos son una fuente concentrada de colesterol con 215 miligramos por cada huevo grande, estos se pueden incluir en una dieta para el corazón.