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Una de las cosas, que mas he escuchado, y me ha puesto a pensar, es acerca de el amor de pareja, uno siempre escucha expresiones tales como, es que ya no lo amo, es que ya no la amo, es que ya le deje de querer, se murió el amor! Me pregunto, porque nunca nadie dice es que ya no amo a mi hijo o a mi hija, porque ya no amo a mis padres, es que ya no amo a mis hermanos, y cosas así, aunque la familia se peleen y tengan problemas serios, y se lleguen a tener rabia, y hasta dejarse de hablar por un tiempo, la gente termina diciendo, bueno pero de todas maneras es mi familia.
Cuando la gente se casa, comienza a haber un desbalance entre lo que son las personas que hemos aprendido que son nuestra familia desde que éramos niños, y la familia que estamos formando con un extraño, a quien ahora lo llamamos también familia. Y aunque no nos lo decimos muchas veces, es por eso, que ante cualquier problema con nuestros cónyuges, algunos de los dos, o ambos lo primero que hacen es recurrir a buscar ayuda a su familia (papá, madre, hermanos, tíos, primos, e incluso familia política) pero no pueden ver como familia a esa persona que vive con uno todos los días, las 24 horas, que conoce nuestros mas profundos defectos, que nos acepta con todas nuestras virtudes y defectos, que teniendo tantas opciones en el mundo, se conforma con estar al lado nuestro, pudiendo intentar buscar mejores opciones.
Porque siguen con nosotros, y aunque aun muchas veces, la echamos de nuestro lado en momentos de ira, ellas siguen estando allí, nos perdonan, e intenta continuar como si eso no paso?, Pues, en el fondo, aunque no lo admitimos, sabemos que esa persona es como nuestra familia, sufre si estamos enfermos, pelean por nosotros cuando otros nos hacen daño, se sienten orgullosos de nuestros logros, y se ponen celosos, cuando perciben cualquier intento de que otra persona pueda ocupar su lugar en nuestras vidas.
Tenemos que admitir que son nuestra familia, hay algo muy dentro que nos une a ellos, que no se ve, que no se sabe que es, pero nos unió, sin conocerte creyó en ti, sin conocerte te amo, y sin conocerte te escogió entre tantas personas de tu mismo sexo.
Pero, ¿por qué sientes que ya no le amas? Muchas veces en todas las relaciones humanas existen momentos de alta tensión, inconvenientes, diferencias de opiniones, entre otras cosas que no siempre son fáciles de manejar, pero cuando se trata de la pareja esos conflictos se vuelven mas fuertes, porque se trata de que tus decisiones, ya no son tus decisiones, ahora están ligadas a las decisiones de otro, y esa situación no es fácil de manejar, porque no estamos acostumbrados a tener nuestra voluntad supeditada a otro.
Resulta que entre tantos conflictos quedan heridas, inseguridad, frustración de no llegar a nada concreto, y tantas cosas que hacen ue las personas, se sientan sin animo, sin fuerzas, y sin aliento, y estas circunstancias, hacen que en el hombre las emociones bajen de nivel, y en la mujer sus sentimientos bajes de nivel también.
Sabemos que casi todos nuestros comportamientos humanos están anclados en cuanto a las acciones de las hormonas, a veces sentimos cosas que nos hacen que se nos disparen ciertas hormonas, y otras veces a la inversa, nuestras hormonas se disparan y nos hacen actuar o tomar decisiones equivocadas. Pero sea cual sea el caso, de cual conlleva a las otras, no debemos ser dominados por nada de estas circunstancias; debemos decirnos a nosotros mismos repetidamente hasta que estemos claro; "Mis emociones no me pueden dominar, mis sentimientos no me pueden dominar, y mucho menos no me pueden dominar mis hormonas"
En el caso del hombre, lo que mas le domina a el son sus emociones, la mayoría de los hombre tienden a ser muy emocionalista, y precisamente, lo que en mi pensar diferencia a un hombre de ser maduro e inmaduro, es que entre tantas cosas, sepa ser responsable y sepa no dejarse llevar por sus emociones, las cuales son pasajeras, y van y vienen como las olas del mar.
En el caso, de las mujeres, es el sentimentalismo lo que nos domina casi siempre, y lo que nos hace diferentes a una mujer de otra, en cuanto a su grado de madurez, entre otras cosas, es que sepa tomar responsabilidad de su vida, y sepa tener control de sus sentimientos.
En el matrimonio, tal vez ambos puedan tener esos conflictos de tratar de resolver si aman a su pareja o no, ya que a veces los problemas: · Crean en el hombre mucha angustia, y como no sabe canalizar esas angustias, pierde en gran medida sus emociones, y es cuando entonces llega al hogar ve a ala mujer y ya no le emociona esa mujer, pero cuando sale a ala calle, le emocionan otras, y el no entiende porque y entonces es cuando empieza a creer que ya no la ama, pero su falta de emoción, no es porque no la ama, sino porque al verla, su inconsciente asocia todas las emociones desagradables que han vivido juntos en medio de conflictos y esto le genera temor, angustia y falta de emoción. Pero resulta que tratando el de revisar en su mente, porque su mujer no le emociona, entonces cree que es porque esta mas vieja, mas flaca, mas gorda, y menos atractiva a los ojos.
· En el caso de la mujer, crean mucha decepción, frustración, baja estima, y molestia y falta de perdón, ya la mujer aunque lo ama, cuando ve al hombre, ve al culpable de que sus sentimientos estén maltratos, se siente victima, de cual agresor, y es cuando sus sentimientos se encuentra y se confunden, es como si pensara, porque tengo que amarlo si me hace daño, es como si por dentro hubiese una auto-culpa de porque yo tengo que permitirle que me hiera, y me maltrate, no debería amarlo, no debería ni pensar en el, porque cuando piensa en el lo que le vienen a la mente son malos recuerdos, y la mujer piensa repetidamente en esos pensamientos, y mientras mas recuerda cosas malas, o aparecen conflictos nuevos mas se dice asimismo, no debería marlo, me hace daño, solo me hace sufrir, hasta que llega al punto de que cree que no lo ama, pero en realidad es falta de perdón, lo que tiene en su corazón.
Lamentablemente, como nadie en la calle, tiene que estar sometido con nosotros en la misma presión que vivimos con nuestra pareja, a los demás se nos hace mas fácil compartir con ellos, sin resentimientos, sin temor, y el sentirnos libres, comprendidos, sin reproche, sin compromiso de ningún tipo, cuando tratamos con gente de el sexo opuesto, y no nos hacen sentir lo que nos hacen sentir nuestra pareja, podemos llegar al punto de extraviarnos de la realidad, y confundir lo que sentimos.
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