Preparación
Proceda igual a la receta original, pero por supuesto usando una utensilios mas grandes.
Para congelar alimentos preparados, los mas conveniente es seguir algunos consejos básicos:
1. Remueva todos los huesos y elimine toda la grasa posible, cuando prepare un guiso, déjelo enfriar y descarte la grasa que se forme arriba, antes de meterlo en el contenedor ideal.
2. Etiquete muy bien, dando la información precisa de lo que contiene (ejemplo: carne a la ranchera para 4 personas).
3. En la etiqueta si lo desea puede especificar la manera de usarla (descongelar a temperatura ambiente volcar en una olla y calentar a fuego medo removiendo, puede ser un ejemplo). Así cualquiera de su familia puede hacerlo al necesitarlo.
4. Si la finalidad de un plato preparado es congelarlo, hágalo mas concentrado, esto le permitirá ahorrar espacio en el congelador y al calentarlo puede agregarle agua, salsa, jugo o cualquier liquido, que además de prestarle mas sabor, lo hace mas ligero para calentarlos de nuevo, sin que se pierda su sabor.
5. Usted puede preparar contenedores cilíndricos o cuadrados cubriéndolos por dentro con una bolsa plástica para congelar, y permitir que sus guiso o sopas se congelen, cuando estén sólidos, simplemente retírelos de los contenedores rígidos y ciérrelos herméticamente, apílelos en sus cestas para congelar.
6. Mantenga los alimentos preparados a mano, para esto utilice una de las cestas que están dentro del congelador. Recuerde que unos del os fines de su congelador es ahorrarle tiempo. Así que nada mas fácil que sacer un guiso congelado del congelados, ponerlos dentro de una olla en la nevera y dejar que se descongele toda la noche. Si usted trabaja, o esta haciendo diligencias, solo necesita llegar media hora antes a casa y calentar el guiso, el arroz congelado, tostar los panes preparar una ensalada y listo, ya tiene un almuerzo para la familia en momentos.
7. Recuerde que si usa alimentos que están congelado debe sacarlos con tiempo del congelador para permitir que estén descongelados y a punto para ser calentados, horneados o tostados.
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